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Domingo Pérez Minik (Santa Cruz de Tenerife, 1903 - 1989) fue un escritor español. Intensamente vinculado al teatro, se integró en su quehacer como actor y director vocacional, dedicándole una gran parte de su atención crítica. Inició su actividad literaria en la revista tinerfeña Hespérides, y cofundó en el año 1932, bajo la dirección de Eduardo Westerdahl, Gaceta de Arte, una de las publicaciones periódicas más significativas de la vanguardia europea de entreguerras, en especial del Surrealismo; bajo el patrocinio de esta revista se celebró en Santa Cruz de Tenerife la primera exposición surrealista de España, con la presencia de André Bretón.
Republicano declarado y miembro del Partido Socialista, fue encarcelado en la Prisión de Fyffes al comienzo de la Guerra Civil viéndose obligado al recobrar la libertad a mantener un forzado, largo y prudente silencio, comenzando a desarrollar una amplia actividad como actor de teatro, primero del grupo 'Pajaritas de papel', pero sobre todo en el Círculo de Bellas Artes de Tenerife. En 1950 trató de reflotar la prestigiosa 'Gaceta' de la época republicana, con el nombre de 'De Arte', logrando publicar sólo un número al ser la iniciativa mal vista desde la política.
Fue una de las personalidades más relevantes en la crítica literaria del siglo XX español, a través de su labor en la revista Ínsula de Madrid. Junto con Eduardo Westerdahl y Pedro García Cabrera participó en la creación y mantenimiento del suplemento 'Gaceta Semanal de las Artes' (1958-65) del periódico La Tarde, y colaboró en diversas publicaciones nacioonales e internacionales como Triunfo, Revista de Occidente, Primer Acto, Cuadernos para el diálogo, Cuadernos Hispanoamericanos, La Nación de Buenos Aires, 'Ibérica' de Nueva York (donde mantuvo el rótulo de 'Cartas de España' con el seudónimo de 'Juan de Toledo'), en de Madrid, en el Boletín de la Fundación Juan March, etc. También fue un colaborador habitual de los periódicos tinerfeños 'La Prensa', La Tarde y El Día, bajo el seudónimo de 'Enrique Arona' y 'E.A.' Ejerció la crítica literaria y teatral en todo tipo de publicaciones especializadas o no.
Sus libros y archivo fueron donados a la Biblioteca Pública del Estado de Santa Cruz de Tenerife y consta de 5600 monografías, 1183 cartas, 167 títulos de revistas, 300 fotografías y documentos sueltos.
En los años fructíferos de la II República, un grupo variopinto de intelectuales jóvenes intentó subvertir, desde Tenerife, toda norma estética, provincianismo pacato o arte decadente que se les pusiera por delante.